jueves, 10 de enero de 2013

Tocó en Español.

Introducción
El español es mi lengua materna. Para muchos países, esto es símbolo de atraso. Peor aún, para los españoles, el Español que hablamos y escribimos es pésimo. Esto es lo que discutí en algún momento con un colega: estamos hablando un idioma sin identidad, que fué impuesto, y que además, no pudo adaptarse a los dialectos y costumbres lingüísticas de sus pueblos dominados.

Con esta moral, escribo entonces mis pensamientos sobre como entorpecer aun mas ese "romántico" lenguaje, aprendido con sangre derramada de mis ancestros indígenas.

Español: Atado al islam.
La razón por la cual el Español insiste ser una lengua romance en lugar de una lengua arabiga es aún un misterio para mi. Sin embargo, son muchas las palabras y más los signos de referencia que unen al Español con el Parsi o el Turco, por ejemplo. En ese sentido, palabras como Alcaldía, Almohada, o inclusive almohabana, tan tradicional en mi país, son originarios de la lengua arabe, cuando los moros estuvieron en la península ibérica. Qué puede pasar entonces, si más bien empezamos a esribir palabras del Español en Arabe, en lugar de perder la identidad en la vertiene Anglosajona? Fíjense que los mismos angloparlantes preservan su alfabeto de pronunciaciones sobre el alfabeto latino de escritura. Entonces, qué fué lo que perdimos? Por qué no rescatar la poca identidad que los Peninsulares nos han impuesto a golpes? O mas bien quieren migrar al Judío, como el reinado español quiere volver a traer a sus tierras a conveniencia?

El español. El idioma plagiador por excelencia.
Cuántos anglicismos debemos seguir soportando, dada la evidente escases de nuevas e importantes palabras, especialmente las que aparecen en el idioma tecnológico? El problema es que la mayoría de las palabras que aparecen (especialmente las monosílabas) provienen del anglosajón, el latín, el arabe o de cualquier otra lengua, sin un origen explícito. Peor aún, la copia es descaradamente complete, perdiendo completamente el origen de la palabra.

Palabras largas y cortas.
Se dice que la antiguedad de la palabra se determina por su longitud. Nuestros ancestros solo se comunicaban a través de fonemas y vocablos cortos. Así, los primeros nombres a los objetos eran precisamente aquellos que utilizaban o referenciaban comúnmente. Esto se asemeja mucho a la ley entrópica de compresión de Hufman: Lo más utilizado puede representarse con poca información. Para establecer la comparación, utilizaremos las palabras anglo: sun, cut, earth, (proximamente lo pongo en fonemas para que quede más clara la explicación) son palabras que dan a entender que desde hace mucho se pronuncian y que vienen desde el principio del lenguaje. Por otro lado: comprehension, aknownledgement, civilization, son palabras que fueron creadas después de establecerse el idioma, así que empezaron a usarse después. Ahora hablemos del Español: hay varias palabras que en deberían ser cortas por su uso y antigüedad, pero no es así: star->estrella, let->permitir (notese que el antónimo si es largo en lengua anglo: forbid) become->llegar a ser (más ejemplos pronto). Esto significa que el peninsular no las usó o no las conocía. Esto implica que muchas cosas que debieron usar en un principio, lo adoptaron de otras lenguas. El crecimiento de estos anglicismos se hace ahora más frecuente, debido a la importación tecnológica.
Anexo: Los invito a revisar en cuáles idiomas una palabra que para un lenguaje significa "bondad" o es solo un nombre, para otro lenguaje significa "veneno" o "desdicha".

Yo pego las palabras, y tienen mayor sentido.
Diosmediante, sinembargo, deste. Son palabras que normalmente se usan separadas, pero que al hablarlas suenan muy juntas. Cual es el problema de juntarlas? Sonaria mas como una regla Anglosajón y perderiamos esa añeja identidad de ser Hispanos? Yo simplemente digo, que se puede adquirir una nueva connotación a ese tipo de palabras, y que las Academias de la Lengua se rasquen la cabeza inventando palabras sin sentido en lugar de realizar composiciones de palabras, como cuando uno añade compases en una melodía. Nos vemos el findesemana.

Misma letra, dos fonemas, ningún sentido.
Está bien que existan palabras homófonas. El sentido pudo haberse cambiado en algún evento histórico, por lo que algunas palabras hayan sido igualmente asignadas para dos diferentes significantes. Lo que se va presentando ahora es que se están juntando las letras para el mismo fonema. Más aún, es precisamente esta integración la que hace que la ortografía se esté convirtiendo en algo tan complejo de manejar, especialmente en chats. Es entonces ésta la evolución hacia la simplicidad del idioma? Vamos a los casos:
  • "b" y "v" ya suenan igual a [b]. Entonces, qué sentido que ese animal que nos provee la leche pueda escribirse como "baca" o "vaca"? O se regresa a la [fv] que tenía antiguamente la "v", o le diremos "buen biaje a tan birtuosa letra, que a la bista se beía bien". Lo mismo pasa con la "y" y la "i". La primera solo suena a [y] al principio de una palabra, pero como conjunción "parece que la yubia no cesa, están yobiendo gatos i perros" ¿Ya ven que "y" se puede usar para que por fin la "ll" suene a lo que es, a una "l" pronunciada larga?
  • La "k" no se usaba mucho en español. Sin embargo, para abreviar la "que"o la "qui", se ha recurido a cambiar la "q" con la "k", por su afinidad fonética. ¿Sería esta la hora de actuar para preservar el "que" y el "qui"? Si las preservamos, la "k" se la podemos regalar a los anglosajones. Por otro lado, "ka,ko,ku" quedan como "ca,co,cu", como se puede representar fonéticamente para estas sílabas. De hecho, la "c" se enseña como "k". Que hubo pues a regresar.
Una excepción. "ge" y "je" se han presentado para el mismo fonema [ge]. El castellano lo identifica bien, pero el hispanoamericano lo ha fusionado. Si se regresa a la "g", se puede incrementar la riqueza fonética al cambiar el fonema de la "je" por la [ye]. volveríamos a "[g]irafa" nombrando a la palabra "girafa" y evitaríamos esta ambigüedad. Qué pasa con "ju" entonces? Cambiaría por "gu"? Oooops...

La h, una letra sin voz ni voto.
No le veo el sentido de ser tan rigurosos con el uso de la letra h. Esto se percibe en la palabra Horno, que por ejemplo, no suena. Entonces, una letra que foneticamente no se puede enseñar, difícilmente se maneja. Para esta palabra, prefiero que la h suene como una f. Entonces, el uso de la h vuelve a tener sentido, y regresaría a sus raíces romance, en lugar de ser una letra privilegiada de las lenguas anglosajón, tales como la x y la w. Esto ayuda a la ventaja del idioma español que no requiere de un alfabeto fonético, como si lo debe aprender el anglosajón. Además, podemos inclusive integrar la letra con el sentido fonético de ésta. Por ejemplo, en lugar de determinar las letras del alfabeto como "ese", "erre", "be", "eme", "ene", entre otras, mejor determinarlas directamente como se conectan en el fonema: |s| (pronunciar s), |r| (pronunciar rr), y lo mismo para las demás. así se les enseñan a los niños, y tal vez por eso sea que haya un retraso en el parendizaje de la ortografía, pues las letras se nombran diferente a como se pronuncian.
Además, si la |h| no suena, cuál es la diferencia entre "Ay", "Hay" y "Ahí"?

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